miércoles, 6 de enero de 2010

El dinero como medio, no como logro




El Señor Agarrado era un personaje de los buenos, siempre con sus pintas de señor, de los que tienen talante pero de los que compran en las rebajas... en las rebajas de comida y bebida. El pobre ricachuelo nunca había ido de viaje por placer, no conocía más allá de su ciudad y de la playa de su mejor y único amigo. Desconocía el placer de un buen vino con jamón de pata negra, desconocía el placer de ver un buen partido en una televisión de plasma en su casa, viendo la lluvia caer a los desgraciados que se encontraban en la calle pero pasando el mismo o más frío porque caía en desgana para poner el calefactor que, por supuesto, le habían regalado. Era todo apariencia. Eso sí, trabaja más duro que cualquier colega de su puesto de trabajo, hacía horas extra cuando podía y cumplía a la perfección.

Lo que no sabía es que iba a ser el más rico del cementerio, pues no tenía hijos ni mujer para no desperdiciar dinero. Todo su ser había sido destinado a amasar dinero, el cual por supuesto que solo veía cada mes a modo de ceros en su cuenta corriente, nunca se preguntó por qué debía conservar tanto para después desperdiciarlo de la peor manera posible. Falleció en un accidente de coche desangrado tras un despiste y pudo haberse salvado si tan solo hubiese aceptado comprar un móvil aunque eso le fuese tan solo unos eurillos.

Su hermano mientras, se encontraba en Argentina, habiéndose comido cada esquina de aquel bello país gracias a una excendecia tras un par de años trabajando como un cabrito, con una mujer que conoció en dicho lugar y de la que dice estar enamorado tras 5 meses besando y amando cada noche cada pedazo de su cuerpo. Allí ha cosechado nuevos amigos, el amor de su vida y su posterior nueva familia.

Porque el disfrute es impagable, no tiene precio, hay que practicarlo, el dinero quizás es un medio para conseguirlo, no un ansia.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Practiquemos todos. Está claro que el dinero es el peor invento inventado. Todo me sabe a reflexión.

Buen tema musical ;)