lunes, 22 de marzo de 2010

Mi nuevo yo.






Varios hechos ocurridos recientemente convergen en un punto común, una única reflexión que mientras escribo intentaré darle los últimos detalles.

Un engaño, un segundo engaño diría, sobre lo que es el amor. El primero lo escudé como cosas de críos, pero al fin y al cabo, descubrir la falsedad relacionado con querer a una persona siempre es lo mismo: dolor, tengas la edad que tengas. El segundo, hará meses, fue el que me ha marcado totalmente mi vida desde el inicio de ese nuevo camino por el que a veces recorro con alegría y otras me tiro al suelo a llenarme la cara de la mierda de los perros que pasean por allí, total, para mancarme mis bonitos zapatos, me ensucio mi desahuciada cara.

Ese engaño, en el que deshecharon mi ceguera por lo más rápido y humillante de los momentos que podáis pensar consiguió que dejara de creer. Creer en las personas femeninas, ir con cautela, que no me importe más que mi familia con vagina, todas las demás que no sean familiares me importan ahora mismo un bledo. Ahora tengo una vagina a la que podré follar en cuanto tenga ocasión, pero lamentablemente (lamentable no sé por qué lo digo, quizá queda algún resquicio de lo que pensaba antes sobre el "amor") no irá más allá de por donde poner fin a mis deseos sexuales hasta el siguiente polvo. No os confundáis, no soy un cabrón, yo para esa vagina seré también una simple poya, dicho y enterado.

Así pues, estos hechos y algún otro que no merezca ser recordado y relatado, al terminar hace unos días un buen acto autoplacentero, me vinieron a la mente un conjunto de sumas reminiscentes cuyo resultado fue... YO, mi yo de ahora, mi cambio que hasta ahora no me había percartado. Manipulo a las personas para conseguir mi fin, divertirme, reir, beber, chingar, hacer deporte, etc. Me sale de dentro, el mismo automatismo como caminar, me da miedo, pero me encuentro realmente bien, soy así.

Creo que no quiero a nadie, hago las cosas por placer, ya sea dinero, objetos o momentos amenos. No me esfuerzo por los demás a menos que vaya con una meta mucho mayor, no soy altruista, este cambio que he dado... Me encanta y me aterroriza a la vez.


1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Harto de TODO tú también?

No te preocupes, en cualquier momento llegará alguien y se irán a la mierda todas tus teorías. Ya verás...